Hace pocos días un viejo amigo me comentaba como la frase "La ignorancia grita, la sabiduría susurra" le había parecido sugerente y probablemente conectada con algunos sucesos de su quehacer y actividad. Pues fue esa constatación y el hecho de una mala experiencia sufrida por un querido colega de aulas, la que me llevó a titular "La ignorancia grita" mi primera columna de Diario Financiero, de este Enero de 2011. Hay muchos que han entendido bien el fondo de la idea (en la que nada importa de que Universidad se trata, sino que el hecho no debe repetirse) y he constatado que hay algunos que no han entendido nada (presumo que no lo lograran siquiera mediante lobotomia). Saludos a todos.